Hola, soy Chica Sobresalto, aunque mi madre y mi padre me llamaron Maialen, un nombre vasco que casi significa cerdo en Italiano y Magdalena en castellano. No voy a escribir esta biografía en tercera persona porque es rarísimo, todo el mundo lo sabe.Hago canciones y las toco con mis amigos. Las vestimos, arropamos y cuidamos todo lo que podemos junto a Santos&Fluren en la producción y El Dromedario Records ocupándose de muchas cosas. Estoy bien rodeada. Empecé a componer con 14 años para no morir en el intento de vivir. A los 17 cogí la guitarra con el típico sueño de cantautora que llega a Madrid y empieza a llenar garitos. No ocurrió. Toqué para dos personas en el Búho Real. Autoedité un disco: “Sobresalto”. El resto del tiempo limpiaba para pagar el alquiler y tocaba en proyectos con los que aprendí y disfruté mucho. En 2020 me presenté a Operación Triunfo y contra todo pronóstico me cogieron, fue muy divertido. El primer single tras salir de la academia fue “Fusión del núcleo” con el que llegamos al millón de reproducciones en solo una semana, fue loquísimo. Sacamos un disco que estaba compuesto desde mucho antes: “Sinapsis” y recorrimos la península tocando. Sinceramente, sueño cumplido. Hicimos una gira que se llamaba “Bailando Raro” y una canción con el mismo nombre. Vamos por el segundo EP de “Retales”, canciones perdidas que nunca llegaron a serlo. En 2023 lanzamos “Oráculo”, entrando de nuevo en los primeros puestos de las listas de ventas en España. No puedo quejarme la verdad.